Seguro que en más de una ocasión has escuchado el concepto de micropigmentación como una técnica estética infalible y que se ha puesto de moda en los últimos tiempos. Es un tratamiento cada vez más demandado por su efecto semipermanente, convirtiéndose en ideal para quienes no quieren perder tiempo cada mañana en maquillarse.
Se define como la solución idónea basada en la introducción con una aguja, a través de la piel, de una serie de pigmentos de color hipoalergénicos que se instalan bajo la epidermis, de tal modo que se conseguirá realzar los rasgos, corregir pequeñas cicatrices o asimetrías y ofrecer un tratamiento de belleza duradero. Aunque se pueda pensar inicialmente lo contrario, se trata de un método indoloro que proporciona resultados instantáneos y efectos permanentes.
La micropigmentación no solo es sinónimo de comodidad y de estética, sino también como una solución eficaz para aquellas personas que sienten ciertos complejos físicos después de una operación estética, tapando las secuelas de la misma, por defectos estéticos genéticos o como consecuencia de una intervención médica agresiva como es el caso de la quimioterapia.
Es cierto que podrás definir pecas y lunares en tu rostro para cambiar tu apariencia, pero también ayudará por ejemplo a definir las aureolas mamarias en pacientes de cáncer que se han sometido a una mastectomía. Será una solución también muy eficaz para quienes han sufrido quemaduras importantes en la piel. Por tanto, la micropigmentación permite a los pacientes ganar autoestima.
El proceso
La micropigmentación es una dermopigmentación en la que se depositan, a través de una aguja, los pigmentos a nivel epidérmico. Como hemos dicho con anterioridad, se trata de un proceso indoloro, aunque dependerá de la sensibilidad de la zona a tratar y de cada persona. Lo ideal sería aplicar una crema anestésica, una hora antes del tratamiento, para reducir al máximo las molestias.
En Cimed sometemos a todos nuestros pacientes a una prueba alérgica y a un estudio riguroso de su rostro. Posteriormente se seleccionará el color que mejor se adapte a la piel de la persona y se realizará una prueba con maquillaje no permanente.
Sus aplicaciones
La micropigmentación facial y corporal es un método alternativo que puede aplicarse con fines estéticos en diferentes zonas:
- Cejas: La micropigmentación ayuda a mejorar la forma de éstas y aumentar su espesor dejando resultados muy favorecedores y naturales en aquellas personas que han perdido el vello en la zona como consecuencia de la vejez, de una depilación excesiva o de tratamientos de quimioterapia.
La micropigmentación en cejas puede derivar, de forma natural, la inflamación leve de tejidos e incluso podrían llegar a constituirse costras que permanecerán en nuestra piel durante tres o cinco días. En cuestión de un mes se encontrarían totalmente fijadas nuestras cejas tatuadas y permanecerán así en nuestra piel en un plazo de dos a cinco años. No obstante, la duración dependerá tanto de la persona como del tono de pigmentación empelado, ya que los más claros desaparecerán antes.
Después de los primeros 30 días de habernos realizado el tratamiento de micropigmentación será recomendable visitar nuevamente nuestro centro de estética para que repasen las cejas, ya que es normal que durante el primer mes se haya podido perder el tono como consecuencia de la aparición de costras y heridas. Hay un tratamiento con crema muy eficaz para cicatrizar las heridas y acelerar la curación en caso necesario.
- Párpados: Con la técnica del microblanding se logrará que ‘la raya del ojo’ esté siempre bien hecha, sin necesidad de apañarnos con el eyeliner.
- Labios: Cuando se aplica la micropigmentación en los labios en un color natural se busca que siempre estén maquillados y perfilados, definiendo el contorno.
- Capilar: Es una técnica cada vez más extendida, entre los hombres especialmente, cuando se presentan problemas de calvicie. En este caso, con la micropigmentación se dará una sensación de cabello rapado y se rejuvenecerá el aspecto.
Fuera cual fuese la zona abordada, se recomienda evitar exponer la zona al sol durante un mes o hasta que la piel se encuentre completamente cerrada, ya que los rayos UVA podrían decolorar el tono y aclararlos. Por consiguiente, tras un tratamiento de micropigmentación te recomendamos aplicar cremas solares de protección 50.
Diferencias entre microblanding y micropigmentación
Aunque son dos técnicas similares, presentan diferencias muy claras. El microblanding está pensando para repoblar una parte del cuerpo sin vello alguno, por lo que introduce pelo a pelo. Por su parte, la micropigmentación utilizará un aparato llamado dermógrafo para repoblar una zona concreta y que ésta resalte. Los resultados en ambas técnicas son semipermanentes, aunque precisarán de un mantenimiento y retoques constantes para garantizar su durabilidad.
En Cimed te asesoramos para que el tratamiento de micropigmentación sea el más indicado en función de las necesidades de tu piel. Es conveniente someterse a más de una revisión anual para cerciorarse de que todo se encuentra en perfecto estado. ¿A qué esperas para descubrirlo?